gnomon: amarillo tiempo


La flecha es como un fingidor. Como el poeta. La flecha es un reloj con una sola manilla. Es un reloj de horas. Un reloj que no tiene noche, que es una noche breve e incisiva. También es un reloj de humo, como las horas. No está aquí, está allí, dice. De hecho no es nada, es sólo el sueño de un demostrativo. Aquella chimenea, ese humo, esta soledad.
Texto: Antonio Aguilar Rodríguez
Fotografía: Juan Bautista Martínez Guevara
Fotografía impresas con licencia, en casa de Antonio Lorente Solano